En una carrera en extremo estratégica, el neozelandés Mitch Evans (Jaguar TCS) se quedó con la victoria en el ePrix de São Paulo de la Formula E. Esta competencia marcó el debut de la categoría en Brasil ante más de 20.000 personas que repletaron las tribunas del Sambodromo do Anhembi, y a la que The Update asistió para cubrir en terreno.
Una pista que fue compleja para abordar por parte de todos los equipos, puesto que no sólo planteaba una novedad total para todos los pilotos – la tercera pista nueva de la temporada – sino que además obligó a todos a diseñar estrategias para contrarrestar el altísimo consumo energético que un circuito con dos largas rectas y alta velocidad exigía.
La recta principal llevó al grupo al primer gran desafío, el complejo de curvas 1, 2 y 3 que no sólo resultaban difíciles de sortear, sino además tenían distintas superficies asfálticas e incluso una rejilla de drenaje, algo que podía causar problemas… Y los causó. Primero fue Edo Mortara (Maserati MSG) quien rompió su alerón delantero tras tocarse con Mitch Evans.
Mortara se cruzó de lado a lado en la curva tres para salir del camino, pero eso hizo que Jean Eric Vergne (DS Penske) se plantara en los frenos y cambiara de dirección bruscamente para evitar golpearlo. Esto causó un efecto acordeón hacia atrás que obligó a Rene Rast (McLaren) a frenar, y sería Norman Nato (Nissan) quien terminó sacando la peor parte. Su auto impactó al McLaren y llegó a levantarse de la pista.
Retiro inmediato para el francés de Nissan en un día nefasto para la japonesa.
Los problemas no terminarían, pues en la chicana de la curva 4 sería Andre Lotterer (Avalanche Andretti) quien dañaría su auto. Igualmente pudo continuar en carrera, pero perdió mucho tiempo.
En la segunda vuelta los problemas siguieron en la misma chicana, pues Sebastien Buemi (Envision) chocó la rueda delantera izquierda de su auto con la parte trasera del de Max Günther (Maserati MSG). Esto le provocó una lesión al campeón suizo con la que permaneció en pista, pero terminada la carrera tuvo que recibir asistencia médica en la pista.
Ya en la vuelta 3 comenzamos a ver los primeros atisbos de lo que sería una carrera de estrategia. Nadie quería realmente liderar y hacer el gasto para que otros se beneficiaran al final, y pronto saldrían los primeros que apostarían por usar el Attack Mode anticipadamente. El primero fue Robin Frijns (ABT Cupra) en su primera carrera tras el accidente que sufrió en México.
Mientras unos como Vergne y Sam Bird (Jaguar) iban al Attack Mode en la vuelta 6, otros como Da Costa y Evans recibían instrucciones para ahorrar energía sin perder contacto con el grupo.
El grupo se mantuvo compacto desde el inicio de la carrera, y se hizo aún más compacto tras la salida del primera Safety Car en la vuelta 8 tras el retiro del otro Nissan. El monoplaza de Sacha Fenestraz dijo basta en la recta tras la chicana y quedó detenido en la pista.
En la vuelta 12 los autos volvieron a la carga, siendo Vandoorne el que más había gastado en el grupo de avanzada. Tenía 3% menos que sus más cercanos perseguidores, por lo que pagaba el precio por tirar al grupo desde el primer lugar. Da Costa comenzaba a escalar al adelantar a Evans para quedarse con el segundo lugar, y luego el neozelandés Cassidy adelantaría a su compatriota de Jaguar, quien comenzaba a ahorrar más notoriamente.
Cassidy tomaría el primer lugar en la vuelta 14 con un espectacular adelantamiento doble para pasar del tercero al primero en la recta principal. Una maniobra que hacía explícita lo complejo que resultaba ser líder de esta carrera en términos de energía. El del Envision aprovechó de adelantar mientras Vandoorne y Da Costa regeneraban energía. Un lujo.
Sin embargo, perdería rápidamente ese primer lugar al pasar inmediatamente a tomar su primer Attack Mode. Pasó del tercero al primero, y luego al cuarto, para llegar a la chicana en segundo. Mucha acción en pocos metros.
Da Costa también perdería el lugar ante Evans, quien aprovechó y comenzó así su escalada hacia los lugares de avanzada.
Pero no todos estaban logrando progreso en la pista. Uno de los líderes del campeonato de pilotos, Jake Dennis (Avalanche Andretti) perdió el control de su auto tras un golpe desde atrás de Dan Ticktum (NIO) y tocó a Pascal Wehrlein (Porsche) en la curva 3. El auto de Dennis quedó dañado y tuvo que retirarse de carrera. Tercera fecha sin puntos para el que otrora fuera animador de este campeonato.
Esto obligó a la salida del Safety Car por segunda vez en la vuelta 16. Cassidy aprovechó su mayor potencia para capturar el primer lugar antes que la carrera se neutralizara.
Ya en la vuelta 19 se reinició la acción con Evans en el 4to lugar y Bird en el 6to, pero los dos pilotos del equipo Jaguar TCS venían con más energía que cualquiera en pista. Esto comenzó a jugar a su favor desde esta parte de la carrera, sobre todo cuando Cassidy y Vandoorne se descolgaron del liderato para tomar su segundo Attack Mode.
Ellos no fueron los únicos. Con todo el grupo usando el mínimo de Attack Mode posible, la urgencia por utilizarlos hizo que Da Costa y Evans tomaran su primera potencia extra en la vuelta 20. En ese momento comenzaba un sprint que nos daría grandes momentos en Sao Paulo.
Antes del final de la vuelta, Evans tomó el liderato previo a llegar a la recta principal. Con Attack Mode y más batería, comenzó rápidamente a consolidarse en esa posición. Mientras tanto, Nico Müller (ABT Cupra) se tocaba con un Edo Mortara que tuvo otro E-Prix para el olvido. El primero terminó yendo a pits, y el segundo tuvo que volver a pista sacando su auto desde las barreras TecPro.
En la vuelta 24 Evans tomó un nuevo Attack Mode, por lo que cayó al segundo puesto. La ventaja de consumo de batería se había esfumado, por lo que sólo dependía de la potencia de su auto y su conducción.
Poco después, Da Costa dilapidaría sus opciones de subirse al podio al pasarse de largo en la recta y quedar detenido un momento en la zona de escape. Un error que le costó carísimo y que arruinó la buena carrera que el portugués había hecho hasta el momento.
Para la vuelta 28 Sam Bird venía en el quinto puesto, tras los dos DS Penske y delante de los dos Porsche, pero rápidamente comenzó a escalar puestos para ir a capturar su tercer puesto en el podio. Le bastaría sólo una vuelta para pasar a Vergne y Vandoorne, y nos dejó pensando que quizás pudo haber logrado más si no hubiese estado tanto tiempo tras sus competidores, pues rápidamente cerró la diferencia de más de dos segundos con los líderes y tenía más batería que todos los demás.
Sin embargo, con 4 vueltas extra a causa de las neutralizaciones de carrera, la baraja nuevamente se revolvió y provocó que todos tuvieran que regenerar mucho más de lo que planeaban para llegar al final de la carrera.
En la vuelta 32 Evans dio el salto hacia el primer lugar al adelantar a Cassidy al final de la recta principal y comenzó a librar su propia lucha para llegar a la bandera a cuadros. Los dos de adelante dieron una batalla titánica para intentar regenerar sin perder sus lugares, y atrás Bird venía con 2% más de batería pero incapaz de sobrepasarlos.
El propio británico aseguró después en conversación con The Update que no quería intentar un adelantamiento que arruinara la carrera propia ni las de sus competidores. Lección aprendida por la fuerza en Hyderabad.
En los últimos metros Evans haría todas las maniobras posibles para mantener a raya a Cassidy, quien llegó a ponerse a su lado derecho en la penúltima curva amenazando con adelantarle. Sin embargo sería victoria para Mitch Evans, seguido por Cassidy y Bird.
Este sería un podio en extremo significativo para el Jaguar TCS, puesto que los pilotos del equipo oficial terminaron primero y tercero, pero el segundo también está motorizado por la marca inglesa. Un resultado que mete miedo en el paddock para el segundo tercio de la temporada 9 de la Formula E, y que revive a un equipo que venía golpeado – literal y figuradamente – en las últimas carreras.
No sólo los tres primeros autos en esta carrera tenían motores Jaguar. Los cuatro motorizados por esta empresa terminaron en el Top 10. Un tremendo logro de este fabricante, y un gran éxito para sus partners.
Cuarto lugar para Antonio Felix Da Costa quien logró recuperar su ritmo, aunque con la amargura de no lograr un podio cuando perfectamente pudo lograrlo. Quinto para Jean Eric Vergne. Sexto para su compañero Stoffel Vandoorne. Séptimo para Pascal Wehrlein. Octavo para Jake Hughes. Noveno para Rene Rast.
Cierra el Top 10 Sebastien Buemi tras una carrera durísima para el suizo, pues el accidente en la vuelta 2 le causó una lesión en su mano izquierda a causa del abrupto movimiento que el volante transmitió al chocar con el auto de adelante. Un accidente similar al que le costó muchas fechas fuera a Frijns, pero – al cierre de esta edición – sin las mismas consecuencias.
La próxima fecha de la temporada 9 de la Formula E será este sábado 22 de abril, en la séptima carrera del año que dará inicio a la primera de dos carreras que la categoría correrá en el clásico circuito de Berlín, Alemania.
