Snapchat permite presumir la cantidad de suscriptores del usuario

Jóvenes definiendo su éxito o fracaso a través de una métrica arbitraria… ¿Qué podría salir mal?

Snapchat está abriendo una puerta que le va a costar cerrar a futuro, y que puede dejar a varios heridos en el camino, esto al transparentar a la comunidad las cifras de suscriptores de sus usuarios. Una métrica que mantenía oculta y que busca beneficiar a los creadores de contenido que deseen presumir sus comunidades, facilitando así acuerdos comerciales.

La función, por ahora opcional, permite que cualquier persona pueda ver los seguidores que otra persona tiene, algo que permitirá poner en su justa medida a las principales figuras, empresas y – por supuesto – usuarios comunes y corrientes que sólo quieren tener más alcance.

Nada nuevo si consideramos que otras redes sociales y aplicaciones tienen esta cifra como base del éxito o popularidad de un usuario, lo que no necesariamente es saludable, algo que cree incluso el CEO de la empresa.

¿Cómo dice que dijo?

En palabras del CEO de Snap, Evan Spiegel, había desechado totalmente transparentar estas cifras en una conferencia tecnológica organizada por el New York Times. En la oportunidad, el ejecutivo aseguró que estas métricas sólo volverían más tóxica la comunidad, esto al hacer que los usuarios compitieran por cifras en vez de por contenido.

“Lo que la gente está viviendo en Instagram es, ellos no se sienten bien sobre si mismos. Se siente terrible, tienen que competir por popularidad”.

Evan Spiegel, CEO Snap Inc.

Esto hoy está disponiible para los 249 millones de usuarios activos diarios de la red social, los que se han vuelto a fijar en esta plataforma tras la arremetida de Instagram y – más recientemente – TikTok, apps que hoy acaparan a muchos de los usuarios que partieron en Snapchat, pero que han visto comunidades más activas y potencial de crecimiento y consolidación mayor en estas alternativas.

Más stress para los que se comparan

Esta es una movida totalmente contraria a lo que otras apps como Instagram han estado explorando, esto al esconder ciertos datos como el número de “Me Gusta” que los usuarios reciben.

En su momento, Instagram inició esta prueba en Australia, Brasil, Canadá, Estados Unidos, Irlanda, Italia, Japón y Nueva Zelanda para quitarle presión a usuarios que se frustran al comparar sus resultados con los de otras personas.

Para evitar que la red social se vuelva una fuente de problemas personales que redunden en crisis o en un impacto negativo para la salud mental, Instagram sigue probando para así dar “un cambio fundamental” en su comunidad de usuarios. Aún no lo hace de forma masiva.

En un mundo donde cada vez más jóvenes definen muchos aspectos de su vida a través de las redes, y donde son ellas las que profitan de la cantidad de tiempo que nos enganchamos a ellas y la información que les damos, esta movida simplemente no puede ser considerada buena.

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